Nuestras reflexiones sobre la nueva ley fiscal

Nuevos cambios en el Código Fiscal

Con la aprobación de la legislación fiscal por el Senado en la madrugada del sábado, la perspectiva de la reforma fiscal está ahora un paso más cerca de convertirse en ley. Dado que tanto la Cámara de Representantes como el Senado han aprobado sus propias versiones de la legislación, se espera que haya un comité formal para fusionar ambos proyectos de ley. Aunque no sabemos cómo serán los términos finales, sí sabemos que hay mucha confusión en torno a la legislación. Parece que casi todo el mundo tiene algún tipo de oposición a los planes, pero las líneas generales desde un punto de vista individual parecen ser que la mayoría de los contribuyentes de clase media y las pequeñas empresas obtendrán una rebaja fiscal, mientras que los residentes con rentas altas en estados con impuestos elevados como Nueva York y California probablemente verán un aumento.

Tanto la versión de la Cámara de Representantes como la del Senado tienen algunas similitudes, como la limitación de las deducciones detalladas de los intereses hipotecarios, las contribuciones benéficas y los impuestos sobre la propiedad, pero también hay diferencias significativas. ESTE ADJUNTO compara ambos planes con más detalle, pero éstas son las que consideraríamos las disposiciones más importantes para los particulares.

El plan de la Cámara pretende simplificar los tramos impositivos, de los siete actuales a los cuatro siguientes. El plan del Senado mantiene la mayoría de los tramos originales, pero rebaja los umbrales.

Se eliminará la deducción por exención personal, pero la deducción estándar aumentará de 6.350 a 12.000 $ para los particulares y de 12.700 a 24.000 $ para las parejas casadas.

Los impuestos estatales y locales ya no podrán deducirse de tu declaración federal según el plan de la Cámara de Representantes. Esto supondrá un duro golpe para los clientes de estados con impuestos elevados, como California y Nueva York, pero tendrá un efecto mucho menor para los residentes en Texas. Los impuestos estatales y locales sobre la propiedad seguirán siendo deducibles, pero con un límite de 10.000 $. El plan del Senado elimina por completo esta deducción del impuesto sobre bienes inmuebles.

La deducción de los intereses hipotecarios se limitará a los intereses de un préstamo por valor de 500.000 $ en viviendas de nueva adquisición. Quienes tengan actualmente un préstamo por encima de este umbral quedarán protegidos. Esto repercutirá en el valor de los inmuebles en las zonas de mayor valor inmobiliario de los estados con impuestos más altos, como Nueva York, California, Connecticut e Illinois.

La deducción de los intereses de los préstamos estudiantiles se elimina en el plan de la Cámara de Representantes. El plan del Senado deja intacta esta deducción.

La exención del Impuesto sobre el Patrimonio se duplicará hasta los 11,2 millones de dólares. Está previsto que se derogue por completo dentro de seis años, pero afecta a un porcentaje muy pequeño de estadounidenses y es probable que se prorrogue de nuevo.

¿Qué puedes hacer ahora?

Aunque no suele ser buena idea hacer grandes cambios ante la incertidumbre, hay algunas cosas que puedes hacer ahora que pueden protegerte contra algunos cambios probables que se producirán en 2018, independientemente de lo que se incluya en el proyecto de ley definitivo. Debes empezar a planificar ahora y consultar con tu asesor fiscal para determinar el mejor curso de acción para tu circunstancia. Sin embargo, las siguientes son cosas que deberían tenerse en cuenta:

Acelerar las deducciones detalladas cuya eliminación está prevista – Las deducciones detalladas que están destinadas a ser eliminadas o que pueden ser limitadas en virtud de estos proyectos de ley incluyen el impuesto sobre la renta estatal y local, el impuesto sobre bienes inmuebles y los gastos médicos. Acelerarlas en 2017 puede proporcionar un beneficio que puede desaparecer en 2018.

Acelerar los posibles ingresos – También deberías considerar la posibilidad de acelerar los ingresos que, de otro modo, se reconocerían en 2018 o 2019, ya que el beneficio de la deducción del impuesto estatal sobre la renta en 2017 puede dar lugar a una factura fiscal global más baja.

Reconocer las pérdidas fiscales antes de final de año – Los contribuyentes pueden beneficiarse de reconocer las pérdidas en 2017 mientras sigan vigentes las normas actuales relativas a la asignación de la base del coste. El proyecto de ley del Senado exigiría un método de «primera entrada, primera salida» para asignar la base del coste de los valores vendidos. Esto puede limitar la disponibilidad de la cosecha de pérdidas fiscales, puesto que ya no se permitiría la identificación de lotes fiscales específicos a efectos de plusvalías. No parece haber ningún efecto perjudicial para la obtención de pérdidas de capital este año, ya que pueden trasladarse indefinidamente para proteger futuras ganancias.

Considera la posibilidad de retrasar hasta 2018 las donaciones que conlleven un impuesto sobre donaciones – Si estás pensando en hacer alguna transferencia de patrimonio que pueda dar lugar a una obligación tributaria por el impuesto sobre donaciones, quizá quieras retrasar estas donaciones hasta 2018 para aprovechar el aumento de la exención por donaciones. Esto no incluye las donaciones que no causarán un impuesto sobre donaciones, como las donaciones de exclusión anual, las donaciones cubiertas por la exención de donaciones existente de 5,49 millones de dólares, las donaciones cubiertas por la exclusión conyugal ilimitada o las donaciones médicas o de matrícula ilimitadas. Dado que el aumento de la exención de donaciones se incluye en ambas versiones del proyecto de ley, tiene sentido retrasar las donaciones, y esperar hasta el año que viene puede resultar beneficioso desde una perspectiva fiscal total.

La incertidumbre sobre estos posibles cambios y sobre lo que se incluirá finalmente en la versión definitiva del proyecto de ley preocupa a muchos de nuestros clientes. Sin embargo, creemos que comprender cómo afectarán estos posibles cambios a tus ingresos personales y de inversión, y tener un plan para hacer frente a estos cambios, minimizará cualquier posible daño. Puedes hacerte una idea de cómo se verán afectados tus impuestos con cada versión utilizando este «estimador fiscal» en https://www.marketwatch.com/story/the-new-trump-tax-calculator-what-do-you-owe-2017-10-26?link=MW_latest_news. Aunque la factura final será probablemente diferente, debería darte una estimación razonable.

Efecto en la cartera de inversiones

Aunque estos cambios afectarán a cada uno de vosotros de forma diferente en función de vuestras circunstancias individuales, los cambios en el código fiscal de las empresas se dejarán sentir de forma más universal en los mercados de inversión. En general, creemos que estos cambios serán beneficiosos para la renta variable, pero los cambios no se dejarán sentir de forma generalizada.

Algunos de los aspectos más destacados de los cambios corporativos son los siguientes:

El tipo del Impuesto de Sociedades se reduce al 20% desde el tipo máximo actual del 35%. Aunque muchas grandes empresas pagan menos que el tipo máximo, este cambio ayudará a muchas empresas más pequeñas. El tratamiento de los ingresos transferidos para las pequeñas empresas y los cambios en la amortización de las inversiones de capital ayudarán en última instancia a los propietarios de pequeñas empresas y contribuirán positivamente al crecimiento económico.

Las empresas con beneficios en el extranjero tendrán una oportunidad única de repatriarlos a tipos impositivos del 5% o el 12%, según la naturaleza del activo. Esto podría tener un efecto muy beneficioso sobre la reinversión de capital para la economía estadounidense.

Eliminación de la deducción por pérdidas netas de explotación (NOL ). Esta deducción ha sido utilizada por «inversores buitre» orientados al valor, que han adquirido empresas con grandes NOL para proteger de impuestos las operaciones corrientes rentables.

Hay otras consideraciones fiscales importantes, que se resumen en el anexo siguiente, pero lo anterior representa el eje principal de los dos planes. A fin de cuentas, creemos que el efecto neto de estos cambios será beneficioso para el mercado global y para la economía estadounidense en general, pero habrá cierta rotación sectorial a medida que se produzcan los efectos.

Como siempre, si tienes alguna pregunta, ponte en contacto con nuestra oficina.